lunes, 21 de mayo de 2012

UNA ASIGNATURA PENDIENTE

En estos días de revuelo para defender los derechos más básicos que las políticas de derechas nos quieren arrebatar, la Educación Pública puede ser la única esperanza de educar en igualdad, dudo que dentro de la privacidad donde se esconde la educación fascista y machista haya lugar para inculcar la igualdad desde los primeros años. Sigue sin darse la importancia que tiene esta educación a pesar de lo que puede representar desde el mismo momento en que se aprende y lo provechosa que puede ser para las relaciones entre hombres y mujeres que se deterioran y terminan sin respeto tan siquiera por la vida. La violencia de género parece no tener fin, cada día conocemos nuevos casos en donde las mujeres son las que salen perdiendo, donde continúan siendo las víctimas potenciales de esa obsesión enfermiza de posesión que tienen, por desgracia, demasiados hombres. ¿En qué ambiente se ha desarrollado la educación de estos hombres que no respetan a las mujeres? ¿Qué pueden llegar a aprender sus hij@s de estas situaciones a las que se ven sometidos desde su nacimiento? Insultos, agresiones, desprecios, violencia, gritos,... NADIE debería tener que soportarlo. Educando en igualdad se terminaría con todos estos problemas que minan las familias y las destrozan poco a poco como un virus que se propaga por toda la sociedad. Hay que ponerle remedio dándole la importancia que tiene desde el nacimiento.
DEFENDAMOS UNA EDUCACIÓN PÚBLICA Y EN IGUALDAD.


Fuente foto: ugt.es